Capitulo 2: Drácula

Drácula, Bram Stoker. 1897


Drácula“En todo caso, es preferible la misericordia de Dios a la de estos monstruos, y el precipicio es alto y cortado a pico. Al pie de este abismo, el hombre puede descansar como hombre”. – Jonathan Harker

¿Sobre qué es?

Hay muy pocos libros con la capacidad de mantener una influencia en la cultura y en la sociedad por más de 100 años. Si bien Stoker no inventó a los vampiros, es en definitiva el referente absoluto cuando se habla sobre estas criaturas. Además de que el Conde Drácula es el vampiro más conocido (Lo siento mucho Stephanie Meyer).

Esta historia se maneja por capítulos que son extractos de los diarios de los protagonistas, los principales son Mina Harker, Jonathan Harker y el legendario Prof. Abraham Van Helsing, además de algunos fragmentos narrados por Jack Seward, Arthur Holmwood, Quincey P. Morris y Lucy Westenra. Con tantos personajes sería fácil perderse en la narración al cambiar el punto de vista tantas veces, pero el lector se acostumbra rápido a ésta dinámica que acaba siendo un juego muy interesante entre tiempos, lugares y hechos.

 Cuenta la historia sobre como Jonathan es llevado al castillo del Conde, el tiempo que pasa ahí y como poco a poco se da cuenta de que su anfitrión no es lo que parece ser, se atreve a explorar el castillo por su cuenta y lo que descubre son cosas espantosas, cosas inhumanas. Después de eso, nos narran la travesía que atraviesan los personajes principales para detener al Conde de expandir su reino, una tarea que no será fácil y pone a prueba sus nervios, corazones y hace que hasta los más machos del grupo se aferren a sus crucifijos en los diversos clímax de esta historia.

En mi opinión…

Ya mencionaba arriba que hace falta mucho talento para escribir una obra que perdure por tantos años, una obra que de a conocer un monstruo que sirva como inspiración para mitos, leyendas, películas, obras de teatro e incluso secuelas escritas por el hermano de Stoker, mismas que no alcanzaron (ni de cerca) el mismo éxito que la entrega original.

Lo malo es que es un libro lento por ratos, sólo para ceder unas cuantas páginas de acción y emoción después de haber leído 70-80 páginas de preámbulo. Es justo en este mismo punto que se encuentra uno de los fuertes del libro: Drácula no regala nada al lector, debes adentrarte en la historia, entender lo que pasa por las mentes de los personajes para entender el terror. Este suspenso y el ansía son los que hacen especial a este libro.

Léelo sí…

Te interesa conocer como nace el fenómeno de los vampiros en la cultura popular. Léelo si crees que un vampiro es el sueño romántico que nos han vendido en los últimos 6 años, al mismo tiempo léelo si quieres limpiar esa idea de tu cabeza. Léelo de noche con luz tenue, para maximizar las emociones, pero cuidado con quedarte dormido en las partes mas lentas.

Comentarios finales

Existe la ventaja de que tu librería local seguramente tiene una copia de este clásico de la literatura de terror, si buscas la experiencia completa pídelo como tal, aunque también existen versiones más cortas y versiones para adolescentes. Estoy seguro de que todas valen la pena.

Reseña final

87/100 Creo que es lo justo para quién dio a conocer a los vampiros y de paso creó a un caza-monstruos como Van Helsing.

Capítulo 1: El blog de Cruda Literaria.

Cruda Literaria.


Martes, 12:04 am.

Acabo de cerrar un libro, mi casa esta en silencio y mi perro acurrucado a un lado de mi silla. Me quedo pensando en lo que el autor creó al escribir su obra mientras le busco su lugar en mi librero. Es una lástima que tan pocas personas lean; Demasiada gente se va por las películas, buscando emociones rápidas.

A veces leer un libro nos deja huellas que perduran con el paso de los años. Nos dejan marcas que cambian nuestra forma de ver el mundo, de pensar, de actuar. Conocemos personajes que nos enseñan mundos fantásticos, historias terribles, fábulas y vivencias ajenas a nosotros, pero al mismo tiempo son nuestros mundos, nuestras historias y nuestros personajes. Los adoptamos y aprendemos a vivir con ellos, a veces por un periodo corto de tiempo. Otras veces para siempre.

Un libro nos puede dejar muchas cosas, nos deja una cruda literaria.